THE CLASH - CUIDANDO A LOS FANS

The Clash fue un grupo que siempre tuvo en gran estima a sus aficionados, especialmente antes de la época en la que empezaron a llenar estadios ellos solos, cuando la fama les catapultó al estrellato.

En sus inicios tenían muy claro que querían llegar lejos y de hecho hubo temporadas en los que tocaban los siete dias de la semana, en pequeños garitos o incluso en su sala de ensayo con amigos, pero separandolo del ensayo y haciendo un autentico concierto, que era el ensayo más autentico y real de cara al concierto según su teoria, para después tocar en directo donde se les reclamara.

Durante esta época el líder de la banda Joe Strummer no se marchaba de ningún concierto tras el show sin darse un paseo entre el público o merodear por los alrededores, para conseguir que todo el que quisiera hablar con él o tendría algo que decirle lo haría.

De hecho un pequeño incidente obligó a Strummer a salir en ambulancia en uno de sus conciertos, pero ante la cantidad de gente que se agolpaba alrededor de la ambulancia Strummer mandó parar la ambulancia y no retomaron su camino hasta que la multitud se disolvió tras charlar con el vocalista de la banda.

Otro de los puntos destacables fue en los lanzamientos de los discos London Calling y Sandinista. Para el primero la banda quería un album doble, pero la compañia discográfica CBS no estaba por la labor. Finalmente consiguieron que CBS diera el visto nuevo de incluir un disco extra de corta duración con algún tema más sin encarecer el producto de cara al usuario, pero la banda lo convirtió en un segundo vinilo normal a escondidas de la compañia con lo cual obtuvieron finalmente su disco doble.

Nuevamente dieron un paso más en su siguiente disco, el cuarto de su carrera, Sandinista. Lo lanzaron como album triple y hay dos versiones que dicen que pidieron a la compañia incluir un sencillo junto al album doble, engañandoles de manera similar que con su anterior album y una segunda teoria que dice que los miembros de The Clash aceptaron ver reducidas sus ganancias en favor de que el trabajo llegará a las tiendas a un precio asequible.

Una estrategia que ya no continuaron con su quinto trabajo Combat Rock, de un único vinilo, en el que los problemas de la banda empezaron a aflorar y se saldaron con la salida de Topper Headon y posteriormente Mick Jones, dejando a la banda tocada y a punto de hundirse. Aquí con la vuelta del mánager original de la banda Bernie Rhodes se decantaron por hacer algo más convencional que no los pusiera en los ojos de la discográfica ni de algunos de los fans que consideraban el triple vinilo como excesivo.