THE CLASH - LONDON CALLING

London Calling, en referencia a las retrasmisiones de la radio durante la Segunda Guerra Mundial, es el tercer album de la banda británica The Clash, y el primero en alejarse tímidamente del punk original de la banda para acercarse a otro tipo de sonidos como ska, soul, pop, reggae y rockabilly.

Las presiones de la banda a la compañía discográfica CBS Records hicieron que saliera como un album doble; en la edición en CD todos los temas aparecen en un único disco; al precio de uno solo, como detalle para sus fans. La estratagema que empleó la banda fue, al haber rechazado CBS inicialmente la propuesta del doble disco, la de obtener el permiso para editar un maxi sencillo junto al trabajo; algo que la banda convirtió en un segundo LP normal de 9 pistas.

El proceso de grabación fue complicado, debido a que The Clash rompió las relaciones con su mánager Bernie Rhodes y tuvo que abandonar los locales de ensayo en Camden Town por los de Vanilla Studios en Pimlico, que les consiguió su nuevo mánager Johnny Green, donde compusieron varias demos; que posteriormente las registrarían profesionalmente en Wessex Studios, producido por Guy Stevens.

Las sesiones de grabación fueron caóticas, con Guy que sufría problemas con el alcohol y las drogas, a menudo tirando sillas u otros elementos del estudio para crear un ambiente de tensión en la grabación, siendo los partidos de fútbol entre el grupo en las afueras del estudio los únicos momentos de relajación; especialmente cuando los miembros de la compañía aparecían para supervisar la grabación y los de la banda aprovechaban para sacar toda su agresividad con la disquera, sin dejar de chutar la pelota.

La portada es otro de los elementos interesantes de este trabajo, similar al album de debut de Elvis Presley (como primer album de Rock) y en este con Paul Simonon reventando su bajo durante un concierto en la anterior gira por EEUU (con lo que pretendían simbolizar que este iba a ser el último album de Rock). Lo curioso es que de los dos bajos que poseía Paul en aquel momento, rompió el bueno, algo que no se perdonaría y no volvería a hacer.

Introduciendonos en los temas que componen este album, que decir de la obra cumbre de The Clash, clasificado como el octavo mejor disco de todos los tiempos y el mejor de los 80 (aunque su lanzamiento inglés fue en el 79) por la revista Rolling Stones. Nos encontramos con una obra con temas propios y alguna versión que The Clash rápidamente hicieron suyas, como con muchas otras en su carrera.

El disco abre con la apocalíptica London Calling, un punk rock sobre una melodía reggae en el bajo y un llamamiento a la población ante un supuesto fin del mundo debido a la situción que se vivía por aquellos años; Brand New Cadillac, versión de Vince Taylor y Jimmy Jazz, que saltaría a la fama por aquí con la versión acelerada de Kortatu. Después vienen Hateful, con un estilo más rock y melodía pop y Rudie Can´t Fail, a duo entre Strummer y Jones sobre los Rude Boys de jamaica.

Spanish Bombs la canción punk y ska que nombra las luchas en Andalucía (lugar en el que Strummer se sentía mejor que en casa) durante la Guerra Civil Española y que fue escrita tras una conversación de Strummer con su novia sobre las bombas que había colocado ETA recientemente en la Costa del Sol, mezclando inglés con un pseudoespañol, que la madre de uno de los técnicos (sudaméricano) les dictó telefonicamente. The Right Profile al estilo London Calling, pero más festiva y con metales y Lost In The Supermarket sobre la infancia de Mick Jones, que inspiró muchas versiones y canciones “perdidos en el supermercado” prosiguen junto a Clampdown. Termina la cara B del primer LP la famosa Guns of Brixton, entre el reggae y el punk, escrita y cantada por Paul Simonon, que pasó su infancia en el barrio londinense de Brixton; sobre las revueltas de ese barrio con gran presencia jamaicana.

Wrong ´Em Bollo abre el segundo vinilo con un cambio de ritmo al medio minuto de canción haciendola más skankin. Death or Glory vuelve al punk clashsero, porque muerte o gloria, esa es su historia. Koka Kola y The Card Cheat, a medio camino de una balada nos dejan a una sola cara del trabajo completo.

Lover´s Rock, Four Horsemen y I´m Not Down, más pausadas que el resto del compacto dan a paso a la versión de Danny Ray y Jackie Edwards Revolution Rock y el disco termina con el originalmente tema oculto Train In Vain, que posteriormente fue single. Train In Vain, tema de Mick Jones, es el más popero del disco y aquí pudieron empezar las tiranteces entre Strummer y Jones por el control de la banda.

Habiendose convertido en uno de los discos más influyentes de la época, quizás no aquí, pero si en Inglaterra y en todo el mundo rockero, Sony, propietaria ahora de CBS Records lanzó hace unos años versiones del 25º y 30º aniversario del disco. En estas versiones se suelen incluir The Vanilla Tapes, la maqueta del London Calling grabada en Vanilla Studios, que se perdió en un tren y que apareció años más tarde en un trastero (se muestran canciones sin terminar en la parte vocal, e incluso con otros nombres y alguna curiosidad). También aparece en algunas versiones de aniversario el DVD que entre singles y alguna cosa más incluye The Last Testament, el documental de la grabación del disco.